Cómo limpiar las joyas de plata: el consejo de Nomination

Todos tenemos joyas de plata, más o menos valiosas, y con el tiempo, si no se limpian, sabemos que este material tiende a oxidarse y pierde el brillo. Esta "transformación" suele ocurrir especialmente en verano: con la sudoración, la exposición al sol o simplemente debido a la alta humedad, la plata tiende a ennegrecerse.

Por eso te damos algunos consejos sobre cómo limpiar las joyas de plata para que estén siempre brillantes.

¿Cómo limpiar la plata ennegrecida?

Conocida desde la antigüedad, la plata es un metal muy dúctil, que tiene un brillo metálico blanco que se realza mejor cuando se pule el material. De hecho, para conservar su aspecto brillante, la plata requiere un cuidado constante, ya que con el tiempo tiende a adquirir un aspecto más oscuro y opaco que parece hacerla menos preciosa.

Aquí hay algunos consejos de Nomination para mantener brillantes los anillos, pendientes, collares y pulseras.

Cómo limpiar la plata: anillos

Has notado que tu anillo de plata favorito ya no brilla como antes... no te preocupes, un poco de limpieza es suficiente y quedará como nuevo. Si quieres limpiar un anillo Nomination, como el anillo en Plata con acabado en Oro rosa y Cubic Zirconia fucsia de la colección Carismatica, puedes probar algunos remedios caseros, usando agua tibia mezclada con un jabón suave. Pon agua en un recipiente con un poco de jabón neutro suave y mete el anillo..

Luego pasa la joya por agua corriente para eliminar los residuos y sécala con un paño de microfibra o una tela suave.

Cómo limpiar la plata: pendientes, pulseras y collares

Si te estás preguntando cómo limpiar tus joyas más delicadas sin dañarlas, sobre todo si tienen piedras preciosas y otros materiales, como el collar en Plata 925 con acabado en Rodio y 3 piedras de colores, es importante elegir un detergente no agresivo.

Otro remedio de la abuela para la limpieza de la plata, como la pulsera en Plata con placa central grabable y Circonitas blancas, es un buen jabón desengrasante con agua tibia. Frota suavemente la joya con un paño de algodón suave, teniendo cuidado de no rayar la superficie. 

No te preocupes si tu joya tiene un color verde, que es la parte oxidada, porque desaparecerá. Finalmente, moja la joya con agua corriente y sécala suavemente.